No he viajado nunca a E.E.U.U. y por supuesto no he estado nunca en Nueva Orleáns, pero un profesor que tuve en el instituto, me dijo que echar a volar la imaginación es uno de los mejores ejercicios que puedes hacer para mantener vivo el cerebro. Y eso es lo que me pasa, cada vez que escucho un disco que me gusta mucho, como por ejemplo este fabuloso disco de Allen Toussaint titulado “The Bright Mississippi”.Al observar la portada del disco es como si te transportaras a cualquier calle de la ciudad donde nació el gran Louis Armstrong . Estas tomando una cerveza en el Maison Bourbon Jazz Club, local de la calle Bourbon Street y de repente todo los que están adentro salen a la calle a ver las bandas de Dixieland como van calle arriba con sus trompetas, tubas y banjos amenizando las calles. Subes la calle siguiendo a la banda y entras en un local llamado Funky Pirate y al fondo del local ves a un magnifico pianista vuelto de espaldas tocando una maravillosa pieza de Jazz, con un vaso de whiskey encima del piano y un cigarrillo humeante apoyado sobre el cenicero.
En fin, podríamos seguir y seguir, pero las siguientes fotografías os las dejo para vuestra imaginación, de una ciudad que a pesar de todos los avatares que le han sucedido en los últimos años, se ha vuelto a poner en pie.
Cada canción del disco, es como una maravillosa postal de la vieja New Orleáns, rodeado de alguno de los mejores músicos de Jazz de la escena actual como el guitarrista Marc Ribot, el trompetista Nicholas Payton o el bateria Jay Bellerose, y dirigidos por la batuta del joven productor Joe Henry, el pianista Allen Toussaint convierte viejos clásicos del Jazz de New Orleáns en nuevos clásicos de hoy.
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