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lunes, 2 de diciembre de 2013

Avantasia:... Es Cojones La Cosa...



Le contaba el poeta Rafael Alberti al escritor Benjamín Prado una anécdota referida a la estancia en la península ibérica del escritor Ernest Hemingway, por la obsesión de éste por captar y utilizar los localismos, los giros idiomáticos y la pura jerga de los lugares que frecuentaba. Alberti hablaba de la fijación del escritor por la frase más utilizada por el norteamericano:"Es cojones la cosa". Reinterpretación del castizo "Tiene cojones la cosa".

Y es la frase que me ronda cuando, pasados meses de la salida de este grandisimo disco, "The Mistery of Time", al cual, de manera imperdonable, no he dedicado un post,  pero sigo y sigo escuchándolo de principio a fin, elevándome con sus prodigiosas canciones e interpretaciones sin que, mi reticencia a escuchar este Heavy del siglo XXI, forme barrera inexpugnable y ceda ante la arrolladora obra del pequeño y, sin embargo, gigantesco Tobias Sammet.

El germano ha elaborado una deliciosa obra poseedora de todas las virtudes de la ambición sinfónica del Heavy Metal de Centroeuropa sin ninguno de sus defectos.
En las diez canciones de esta magna obra conceptual, Tobias Sammet nos ofrece un vertiginoso tour de force por la MÚSICA, así, en mayúsculas. Porque rebajarse a calificar este disco de Heavy, o Heavy Sinfónico es como decir que el océano es H2O.

Tobias Sammet reúne para esta maravillosa historia llena de esa magia rebosante de imaginación  que es Avantasia, a músicos y amigos que ocuparon una parte fundamental en las obras del músico alemán.
Sammet al bajo y las voces Michael Kiske y Bob Catley ,ambos desde el comienzo de la Metal Opera; Oliver Hartmann en las guitarras, Sasha Paeth produciendo el disco y en las guitarras; Miro Rodenberg de nuevo en los teclados, y en la batería nada más ni nada menos que Russell Grilbrok de  Uriah Heep. Está otra vez  Bruce Kulik, en Kiss en los noventa, como guitarrista invitado, más Cloudy Yang en las voces femeninas. Y además  Arjen Anthony Lucassen,a las guitarras.
 Y en las voces, ¡joder que elenco! a Ronnie Atkins (Pretty Maids) y Biff Byfford (Saxon),  Y las dos sorpresas mayores del disco son Joe Lynn Turner, aportando la parte mas rockera, y Eric Martin, en los sonidos más melódicos.Para flipar.

Los sonidos de la obra se mueven con elegancia  por caminos que este que suscribe, adoró y adorará siempre. Me vienen a la cabeza el " Birds of Prey" de Uriah Heep cantado por el grandisimo David Byron. O las mejores obras de otra banda pródiga en discos conceptuales, Styx. Si te escuchas "The Mistery Of Time" estoy seguro que acabas captando esas masas corales que tan bien se les daban a Shaw De Young  y los Panozzo. Sólo que, en el caso de avantasia, son a veces hasta seis u ocho voces. Conjuntadas, volando hacia una  gloriosa interpretación.
El trabajo arranca con “Spectres”, el dueto que muchos querían oír de Joe Lynn Turner junto a Tobias Sammet. Un tema limpio y con un sonido de esos que te agarra el alma y no te la suelta, el primer punto alto del disco. Pero es que eso sólo es el principio, porque seguimos con “The Watchmakers’ Dream”: poderoso, arrollador, enérgico, sublime. Es de esas canciones que te elevan a un cielo siempre azul. Turner nuevamente junto a Sammet, dan muestra de como se  hace una canción que, alk menos para mi, será, es ya, legendaria. El ex Rainbow toma más participación del tema, cantándolo casi todo, pero con la particularidad de que en ciertos tonos fuerza la garganta y la domina para alejarse del estereotipo de su prodigiosa voz.
“Black Orchid”,con Biff Byford a dúo con Sammet,esa voz que desgarra el sonido, terrosa, vieja y sabia; un lujo para todos los que nos criamos con el "747 Princess of the night".
 Después la melodía se adueña del disco cuando esa fuerza arrolladora que es Michael  Kiske dirige el tema. El Ex-Helloween sabe imprimir a cada puñetera canción que canta una personalidad planetaria. Y se constata en ese temazo llamado “Where Clock Hands Freeze”, cantado,conjuntamente con Sammet y la German Film Orchestra de Babelsberg,donde la magia y una luz que hace sonreír al alma se apoderan de cada nota de la canción.
“Savior in the Clockwork” dura ¡¡10.40 minutos!!con Joe Lynn Turner, Biff Byford y Michael Kiske que nos va acercando, canción a canción a  “The Great Mystery” un grand finale digno de un disco inmenso, adictivo, poderoso y lleno de magia y música que llega desde y para el corazón.

Ver en directo todo este despliegue sonoro e imaginativo es todo un lujo que pude disfrutar, en la mejor compañía del mundo, hace meses. Aunque supo a poco al no poder ofrecer toda la parafernalia que Sammet y la banda es capaz de ofrecer en un concierto exclusivo de Avantasia. Es lo que  tienen los festivales, castran y reducen la magia a buenisimos trucos de prestidigitación. Sin embargo, y aún con esto en contra, el de Avantasia es uno de los mejores conciertos que he visto en años.

Quitaos prejuicios. Airear vuestras orejas y abrid el alma y el corazón a la magia, el talento y ese algo único que poseen algunos creadores y dejaos llevar hacia ese mundo pleno de poderosas y adictivas canciones llenas de imaginación...

                                               ¡¡¡Es cojones la cosa!!! 








jueves, 6 de junio de 2013

Avantasia En El Sonisphere: Aún Hay Sitio Para La Magia En El Mundo




Cuenta la historia, que hubo un tiempo en que las sorpresas, los momentos mágicos, la gloria de algo único, se lanzaban a nuestros corazones, a nuestras almas como una horda de ángeles provenientes del infierno.

Cuenta la historia que hubo una noche extraordinaria en que los sueños se hicieron realidad y las sorpresas se abalanzaron sobre nuestros pobres corazones descreídos haciéndome,a mí en concreto, cambiar de opinión respecto de sonidos que nunca creí que iba a volver a escuchar y, sobre todo, a disfrutar de la manera en que lo hice.

Hace días, pero su eco aún retumba en mi corazón, que Avantasia realizaron un, desgraciadamente, corto concierto en el festival Sonisphere. Este es el único “pero” que puedo objetar a una noche extraordinaria. Afortunadamente, su factótum Tobias Sammet prometió volver a la península y ofrecernos, a todos aquellos ávidos de buena música, un concierto,  o el concierto definitivo de la mega banda alemana.

¿Qué tiene Avantasia que hace que te pares a escuchar y frenes las emociones para poder disponer de toda tu alma dispuesta a sentir cada segundo de cada canción, o casi, cada canción de la banda? Talento, profesionalidad, orgullo, pasión, deseo y la necesidad de trasmitir todo aquello que bulle en la cabeza y el corazón del pequeño gran músico.

Desde el origen del nombre de la banda, una deliciosa mezcla entre Avalon y Fantasía, al desarrollo de complicadas  y monumentales obras conceptuales, hasta el buen rollo que los músicos tienen en escena, todo empuja a encarar a la banda con una sonrisa, con una necesidad de niño asombrado ante un truco mágico que te va a sorprender y a  emocionar.



Dice Sammet:..."Sabía que había dicho todo lo que posiblemente podría decir en nombre de Avantasia. Pero eso no es de  lo que  Avantasia trata. Quiero crear más buena música,  quiero crear más mundos de fantasía, historias más grandes y más épicas". El resultado de ese deseo fue El misterio del tiempo. Obra que marcó el comienzo de un nuevo concepto y un viaje único a un mundo donde música, pasión y talento se entremezclan para crear una obra rotunda que en directo funciona como, mira que curioso, una maquinaria de precisión.
 Avantasia  cuenta en el disco con la alemana Babelsberg Film Orchestra, viejos conocidos de la otra banda de Sammet, Edguy, e invitados como el baterista Russell Gilbrook,  los guitarristas Bruce Kulick, Oliver Hartmann y Arjen Anthony Lucassen, mientras que las voces corrieron a cargo de Joe Lynn Turner, Biff Byford, Michael Kiske, Ronnie Atkins, Eric Martin, Bob Catley y Cloudy Yang.

 Pero es que en directo la gira de Avantasia incluye a musicazos como Sascha Paeth (guitarra), Oliver Hartmann (guitarra, voz), Felix Bohnke (batería), Andre Neygenfind (bajo), Miro (teclados) y Tobias Sammet, Michael Kiske, Bob Catley, Ronnie Atkins, Eric Martin, Thomas Rettke y Amanda Somerville a unas voces que parecen salidas del  sueño de un músico envenenado por la necesidad de crear la mejor canción del mundo.

Joder, en directo yo escuchaba, casi en cada canción, seis voces afinadas que interpretaban, los temas de su “Mistery Of Time” y otros temazos de álbumes como “Wicked Simphony” o “The Scarecrow” y apenas podía creerlo. Estos músicos suenan igual que en el disco…incluso mejor, porque cada tema posee ese fuego que sólo los músicos apasionados tienen en directo.  Y, lo más bonito, destilan un buen rollo y una actitud de amor y cariño hacia la obra que desarrollan que te contagia de manera absoluta y demoledora.

Bailé, canté, coreé y sonreí durante todo el concierto. Veía a mí alrededor a la gente coreando las canciones de la banda con una pasión y un buen rollo que me hacían sentir bien. Miraba a chavalillos que se sabían cada puta canción, miraba a un sol de medianoche brillar con una intensidad y un fuego tan arrollador que se llevó mi alma por delante y arrancó desde muy adentro risas que aún resuenan en mi corazón.

Las estrellas brillaban en mi interior, a mí alrededor, sobre el escenario y también en el cielo e iluminaron mi camino hacia casa y dejó una luz encendida para que aquel chavalin que fui y que creció yendo a conciertos y festivales de Rock Duro, Heavy y Rock N Roll, me saludase y sonriese después de tantísimos años de creerlo perdido.

Todo es magia si quieres creerlo. Y, utilizando el texto de Tobias Sammet escrito en su Misterio Del Tiempo, cierro mis ojos y me dispongo a escuchar un maravilloso cuento:"Así que tómate tu tiempo y sígueme a un pequeño pueblo inglés durante la época victoriana y únete a un joven científico independiente, de nombre: Aaron Blackwell el cual  se ve empujado a explorar las coherencias del tiempo, dios y la ciencia; desgarrado entre la creencia en su convicción profesional, su intuición espiritual, el  amor y una logia de ocultistas científicos".

Y mucho, mucho y delicioso Heavy Metal…

P. D. Mi más absoluto cariño y agradecimiento a Carolynn por su risa, su fuerza y estas fotos tan acojonantes que realizó...¿Hay algo que no sepas hacer bien?