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miércoles, 21 de enero de 2015

Ryan Bingham: Viendo La Vida Por El Parabrisas


El cowboy escucha el murmullo de la llanura, escucha el susurro del viento, oye la música que cantan las estrellas a su paso por la noche queda de Nuevo México. El cowboy siente la vibración poderosa y adictiva de las canciones que aún están por parir. Se tensan los tendones, como las cuerdas de su guitarra, se ensancha el alma como el cielo de su tierra. Todo gira y aletea y caza y huye y se esconde y busca y aúlla y está vivo en una noche que es una canción.
El cowboy toma aire, mira al universo reflejado en las estrellas y sonríe...la tristeza y la oscuridad quedaron atrás. 
Ryan Bingham toma su guitarra toma aire, se llena el alma de vida y comienza a cantar y a contar su vida y, ya no hay miedo, solo música.

Ryan Bingham sonríe, es un tipo, se podría decir que feliz. Y esto, para alguien que entonó en su último álbum de 2012, "Tomorrowland" "Algunos dicen que los ángeles están mirando hacia abajo. Sólo vi buitres dando vueltas alrededor," marca un necesario y esperanzador cambio de perspectiva.

Algo más lejos quedan ya todas las tormentas que se cernieron sobre el músico en esos momentos. Escribir y cantar sobre las consecuencias de la muerte de sus padres, su madre debido al  alcoholismo y su padre por suicidio, marcaron desazonadoramente aquellos días. Y, aunque su pérdida aún pesa mucho en el corazón de  Bingham, el de Nuevo México cuenta con más días buenos que malos, afortunadamente.
Y ¿como retas a la muerte, al pesar, al dolor a que abandone ese pedazo de alma que ha ocupado en ti? Con vida, con agua fresca del riachuelo a punto de nacer que será el primer hijo del cantautor y de su mujer, Anna Axster.

A su modo, de esa manera desértica y sobria, cargada de un fuego interno que quema casi como el hielo del espacio exterior, Ryan Bingham y su "El miedo y el sábado por la noche" , explora el nuevo gozo de tener a alguien a su lado, de esperar esperanzado algo nuevo e inocente mientras te mueves desde la oscuridad hacia la luz.

Canciones al estilo de Bingham, nada de sonidos luminosos que reflejen las playas de California. Temas autobiográficos como" Nobody Knows My Trouble ", "Hands of time" con esa idea necesaria de tratar de moverse en una sola dirección: hacia adelante.y dejar  de mirar la vida por el espejo retrovisor y simplemente, comenzar a mirar por el parabrisas. o esa belleza que es "Broken heart tattoos ", "Nobody knows my trouble" o "Top shelf drug", poseen ese sonido tan Bingham, ese sonido agreste, poderoso como unas vacaciones de Led Zeppelin en Austin.
Todas estas canciones han sido escritas por Bingham en unos días en que éste, se recluyó en un remolque Airstream en las montañas de California alejado de todo, sin, supuestamente, acceso al mundo ni a sus comodidades.

Las letras del disco tienen un aire descaradamente romántico. Se susurran palabras, se cantan guiños emocionales que solo dos personas pueden entender.
Dice Bingham;"El matrimonio era la única cosa que me ayudado a tirar para adelante en los momentos más jodidos. Esa ha sido la única cosa en mi vida que ha sido tan estable. Así que es lógico que el álbum gire alrededor de Anna, el bebé y la vida delante de mí. Se trata de cosas que está pasando, cosas buenas.
Y este hecho se nota en todo el disco. Son canciones bonitas, brillantes pese a su textura árida y machacona. Temas como "Broken heart tattoos", una carta apasionada que el músico le escribe a su hijo no nacido y realizada, curiosamente, cuando Bingham ni siquiera sabia que su mujer estaba embarazada, destilan una belleza intensa y hermosa. Al igual que ese anochecer en el corazón que es la maravillosa "Fear and saturday night" una de esas canciones que se aferran al alma para siempre.
Bingham otea el mundo con una mirada nueva, o, al menos, más limpia. La banda sonora que inició años atrás suena más esperanzada y brillante y las canciones que suenan en su vida, tienen un bonito motivo para ser cantadas y eso, es lo que realmente importa.

Ryan Bingham:Adventures of you and me

Ryan Bingham: Fear and saturday night:




domingo, 11 de enero de 2015

Ryan Bingham: A La Espera Del Viento


Los días cancelados en mi vida que llevo padeciendo por mor de una enfermedad transitoria que se está tornando demasiado familiar y constante, hacen que todo lo que pasa fuera de mi ¡ay! permanente se vuelvan mágicos, necesarios y tan subyugantes y deseables como el próximo chute del junkie. Por un lado casi al alcance de la mano y del deseo, por el otro, ajenos, lejanos a la ausencia de viento en las velas, de una calma chicha que se me antoja horrorosamente larga.

De ese viento necesario y anhelado que se arremolina en las esquinas del deseo, "Fear And Saturday Night", el quinto y nuevo álbum del norteamericano Ryan Bingham, es uno de los más necesitados para poner rumbo y en marcha mi vida raptada y prisionera.

El día veinte podré ponerle las manos y las orejas al disco del de Hobbs, Nuevo México. Y, por el momento, la escucha de "Broken Heart Tattoos", su primer single me ha dejado un más que delicioso beso en las orejas del alma y preludia lo que puede ser el primer gran disco de este recién estrenado 2015. La deliciosa y brillante melancolía que respira cada nota de la canción, esa harmónica cargada de la sonrisa que se pone al ver amanecer el día, me reintegra, un poquito en el mundo ajeno a mis días anclados. Tatuajes de corazones rotos es una canción hermosa, intensa, brillante, que deja una sonrisa agridulce en la cara y un rastro de esperanza en el  corazón.

Tiempo habrá para degustar el disco del músico, por lo pronto, voy abriendo el apetito para los comensales de canciones intensas y cargadas de pasión que son la marca y la identidad del gran Ryan Bingham.

Ryan Bingham:Broken Heart Tattoos



lunes, 24 de septiembre de 2012

Ryan Bingham : Sentado en el porche de la vida, plácidamente



La vida es, a veces, como esos porches de película norteamericana donde un tipo se encuentra sentado en él, con pose indolente, las piernas estiradas y apoyadas sobre una rama de árbol pulida mientras su cabeza se reclina en la pared de madera de pintura descascarillada y a lo lejos una nube de polvo anuncia la llegada de alguien. Quizá un viejo amigo que viene a saludar y a compartir contigo pedacitos de belleza que el corazón del tipo en cuestión ha creado a lo largo de los dos años que han mediado entre esa maravilla musical llamada “Junky Star” y este viejo saco lleno de Rock N Roll, Americana, Roots, Alt-Country y Blues Rural que se llama “Tomorrowland”.

Y es que queridas y queridos compañeras, tengo en mis garras voraces de buena música y pedazos de emoción el nuevo disco del músico natural de Hobbs, Nuevo México, Ryan Bingham.

Quinto álbum de Bingham, si contamos ese disco llamado “Dead Horses”, sexto si le añadimos el EP “Live Itunes” del año pasado.

Todo el disco ha sido realizado con la ayuda de su mujer Anna Axter y los fans del músico, los cuales, vía Facebook, daban opiniones al respecto de las canciones que Bingham iba mostrando en la red. La autoproducción del músico, junto al productor Justin Stanley ha dado como resultado trece canciones que portan, como en un viejo baúl del oeste cargado de millas y polvo del desierto, estilos musicales como trajes en dicho baúl. Sonidos del más puro Rock n Roll como “Beg for Broken Legs” un maravilloso inicio de fuerza y pureza sin aditivos ni almidón modificado. A los cuales le siguen sonidos más cercanos al Bingham más tradicional y esos Blues Rurales y quedos, como noches en el desierto y canciones como “Western Shore”, “Never Far Behind” o la maravillosa “No Help From God” toda una declaración de intenciones que hago mia.

La música que el de Hobbs crea y nos ofrece como un cigarrillo al atardecer, es brutal. Llena de matices y tensiones emocionales, con unas letras magnificas y cargadas de poesía y pasión. Y, además te ponen ruedas y velocidad al corazón. Canciones que hacen que mires el mundo con una deliciosa mezcla de ternura e ironía como “Neverending Show” o la preciosa y que también hago mía “The Road I'm On”.

Le echas un vistazo al mundo, te das cuenta de lo difícil que es, siquiera, pelear, del extraño autobús en el que estás metido y el delicioso desconocimiento de no saber, del todo, hacia donde se dirige. Somos más que nuestra evolución, más que máquinas que se replican y mejoran. Existe eso absurdo llamado amor que trasciende esos fríos procesos. Ves como el mundo se descompone en guerras, grandes y pequeñas, entre países y personas y casi acabas creyendo que el asesinato es natural y la vida es una guerra constante. Pero, ¿qué queréis que os diga? No, la vida es la voz del universo, la guerra es el cáncer. El amor es la verdadera evolución. El amor es una elección, la guerra un instinto pervertido, la emoción puede atemperar al impulso, la construcción se impone  a la deconstrucción.

No estoy acostumbrado a fiarme de las cosas buenas Acabas acostumbrándote a que alguien desmorone lo que tú has querido construir y cuando miraba al sol, siempre temía que se apagase de un momento a otro.

Ahora quiero ver el mundo de otro modo, sentado en el porche decadente de una vida que persiste, mirando a ese horizonte que te mira si le miras, e, incluso muchas veces, te sonríe. Y escuchando Tomorrowland de fondo, cerrando los ojos y sonriendo.


Ryan Bingham - The Road I´m On

Ryan Bingham - Beg for Broken Legs



miércoles, 29 de septiembre de 2010

Ryan Bingham "El profundo desierto"


Leyendo por esos mundos del Rock N´Roll comentarios al respecto del nuevo disco de Ryan Bingham, me ha llamado la atención los comentarios negativos que ha suscitado este Junky Star.
La verdad es que me sorprende bastante el que, gente que ha podido elevar a los altares obras anteriores de Bingham como el genial Radhouse Sun o el no menos fantástico Mescalito, denosten este nuevo disco ya que, a mi juicio, su disco posee las mismas características creativas que en sus obras anteriores. Tal vez, si, haya algo más de introspección, una mirada interior más profunda, incluso, se podría añadir, que ese desierto interior que algunas personas transitan al cabo de sus vida, sea, tal vez, más acusada. Es cierto que las canciones de este nuevo álbum están trabajadas con mucha sensibilidad y poesía. No en vano, la primera canción del disco lleva por titulo “The Poet” y, de alguna manera, apunta los horizontes a los que Bingham dirige esa mirada tan cargada de intensidad y conocimiento de las cosas de la vida que sorprende en un chaval de veintinueve años.
Para mi gusto este disco tiene una madurez interpretativa y creativa absoluta. Su posición, respecto del mundo del show business, resulta, a mi modo de ver, tan ajeno y alejado que, uno diría, que es la mirada de un músico del siglo XIX trasportado a este siglo neurótico y suicida.
Escuchando las canciones, se descubre a un Bingham rural, lleno de Blues y Country pero con unas letras profundas y llenas de detalles y pequeñas luces en una oscuridad que cubre cada nota, cada estrofa.
Salvando distancias evidentes, uno casi podría afirmar que este Junky Star es el Nebraska springstiniano de Ryan Bingham. Porque, imagino, que para un tío que pasó su adolescencia domando toros en el medio oeste norteamericano, el ganar un Oscar a tan temprana edad y con sólo cuatro discos, sin incluir este último y teniendo por cuarto su banda sonora de la película Crazy Heart, el cual no está completamente interpretado por él, supongo que tiene que ser duro asimilar tanto trajín, tanto “amigo” que surge espontáneamente de ningún lugar definido y tanta adulación.
El álbum tiene canciones que, perfectamente podrian haber sido interpretadas en 1910 como “Yesterday´s Blues” o “Hard Word Trail” a temas de evidente ascendencia americana como “Hallelujah”, “The Wandering” o “Depression” y otros, que son temazos intemporales como la magnifica “Direction of the Wind” o el blues rural y oscuro de “Strange Feelin´in the Air”.
¿Es un disco para cualquier momento? Evidentemente no. Las canciones cualquier canción, tienen su lugar en el mundo propio de la persona. No es para un Sábado noche, si, tal vez para la madrugada del derrotado, o el atardecer de aquella persona que ve claroscuros en cada mirada.
Desde el que suscribe es una obra intensa, profunda, madura y terriblemente adictiva. Déjale un hueco en tu corazón, probablemente, no te arrepientas.

Ryan Bingham - Direction Of The Wind

Ryan Bingham - Hallelujah


viernes, 28 de mayo de 2010

Ryan Bingham "Largas sombras en el desierto"


Ryan Bingham estará viviendo un momento dulce en su trayectoria musical. No sólo ha conseguido el galardón a la mejor canción por su aportación a la banda sonora de Crazy Heart donde el gran Jeff Bridges consiguió el oscar a la mejor interpretación masculina sino que está siendo revalorizado por los "mass" media de su país que lo catalogan de autor en alza.
Y a mi parecer, no necesita un carajo todo eso. Y es que Bingham es un gran autor de canciones que puede, y de hecho lo hace, vivir de su música sin necesidad de la parafernalia y el oropel que al gran público gusta tanto y que tanto suele lastrar a los autores en general. Con esto no creo que el de Hobbs, New Mexico, tenga ningún reparo en promocionarse y ganar pasta pero, no necesita lo superfluo cuando tiene ese puñetero talento como para crear este, su último disco hasta la fecha, sin contar la BSO de Crazy Heart, titulado: “Roadhouse Sun” el cual nació a finales del año pasado y que, inexcusablemente, no habíamos rendido cuenta de él hasta hoy.
El álbum es un magnifico compendio de Rock And Roll, sonido Roots-Americana y Country-Blues rural que te empuja a cerrar los ojos y sentir el crujido de la gravilla del desierto bajo tus botas de cuero mientras el viento te lame la piel e impulsa, a lo lejos, a las águilas y buitres que arrastran su grito más allá de donde alcanza la vista.
Roadhouse Sun es alegría de vida y ganas de Rock en esos garitos perdidos situados en ninguna parte y llenos de la peor gente. Es melancolía y añoranza de amores perdidos o jamás logrados. Son sabanas húmedas de deseo o camas frías y vacías como el alma de sus dueños. Son recuerdos de la niñez entre algodón en flor y ríos que refrescan la piel y atemperan el alma. Son paseos por bosques tan verdes, de árboles tan altos, que el viento se enreda en sus copas y se olvida de que tiene que soplar y arrastrar el polen y sostener al cuervo y al halcón.
Roadhouse Sun son amaneceres en esos propios moteles de carretera viendo ese sol salir por un horizonte incierto pero, igualmente atractivo. Son los sueños, los buenos y los malos, que toda esa gente anónima y derrotada o perdida, tiene hasta que el sol le anuncia que hay otro día de vida, otra oportunidad que perder o aprovechar.
Roadhouse Sun son canciones de gente que nunca has conocido y que, sin embargo, se tropieza contigo a cada minuto de tu vida.
Escúchatelo, Ryan Bingham se explica mejor que yo.

Ryan Bingham - Day Is Done

Ryan Bingham - Rollin' Highway Blues