Hoy el día se ha asemejado al springstiniano comienzo de "Palisades Park", tema con el que da inicio el último disco de los norteamericanos Counting Crows.
El amanecer se desperezaba indolente, ignorando mi enganche a la luna llena que se enredaba con nubes tan perezosas como el amanecer. Los quince grados que había a las cinco y media de la mañana parecían descojonarse del recién estrenado otoño. El mundo, en esos momentos era inmenso y, a la vez, tan estrecho como los pensamientos que se aferraban a mi mente como parásitos intestinales, como heridas lacerantes que mi puta cabeza defecaba por la pura inercia de no ser capaz de ver la belleza que se desplegaba ante unos ojos legañosos y un corazón torpón y aturullado que reclamaba emoción, sensaciones eléctricas recorriéndole cada puta célula del cuerpo, eso para lo que se había estado entrenando, en soledad, desde hacia tantos tantos años.
Salir de la miasma ridícula en la que neciamente me había metido. Escalar o despeñarme por las canciones, por las risas. Darle al alma la excusa para bailar el día, para bailar la vida. Una banda sonora, una sola canción o, si fuese posible, tres, cuatro, seis...un disco entero...Y ahí estaba.."Somebody screamed, All of Jim Jeffries' dreams, Explode into a black fist,He falls to the floor".."Palisades Park"..Cambiándome el color del alma, torciendo el ángulo muerto que era mi vida en ese momento rociándolo de la azul eléctrica emoción, que cantaron La Granja hace tantos años que parece otra vida.
Una canción, una detrás de otra y, ¡¡la ostia, todas buenas!! Y yo admirando mi rotunda estupidez por ignorar este disco, "Somewhere Under Wonderland" de los Counting Crows, porque llevaba años tachándolos de planos, de acomodaticios, de repetitivos. Yo perdiéndome " Earthquake Driver", "Scarecrow", "John Appleseed's Lament", o "Cover Up The Sun" y, desde luego, la soberbia "Palisades Park", con esa estructura tan épica, tan de historia más allá de los minutos que dura la canción. Ese tipo de canción que Springsteen y su banda estructuraron como un poema, un prologo a la muerte y un epilogo a la vida...", "Come outside .Climb out your bedroom window..." Las palabras se elevan, se arremolinan alrededor de una emoción ávida de sangre que recorra la venas cantando canciones que llenan la vida con ese algo indefinible pero tan necesario para avanzar por el mundo como si fuera un puto baile bajo la lluvia.
"En Algún Lugar Debajo Del País De Las Maravillas" son once canciones, las dos últimas, demos acústicas de dos de los temas del disco, cargadas de Rock n´Roll, "Dislocation" de toques de un delicioso Soul, "Elvis Went To Hollywood" de Americana "Cover Up the Sun" y Folk- Rock, "God of Ocean Tides", de melodías que se dan el lote con tu corazón y vuelve del revés las sístoles y las diástoles.
Todo lo que este positivo y brillante álbum que los de Berkeley te ofrecen parece estar dirigido a arrancar las miserias del alma y a pintar la vida del color que más te guste. Las instrumentaciones suenan orgánicas, cargadas de una contagiosa necesidad de alzar orgulloso la cabeza y sonreír. De hacer correr hasta la extenuación a un cuerpo emocional perezoso o con sobre peso de tristeza y pesar. Hay, pues, una necesidad de sudar, de arrancarse del alma el peso superfluo y volar hacia la música como quien vuela hacia la luna llena más hermosa que puedas soñar.
3 comentarios:
Este disco me ha encantado. A pasado desapercibido pero me parece su mejor trabajo en años.
Palisades Park es una cancion increible pero no sepulta el valor del resto.
De lo mejor que he escuchado este año.
Cierto grandisimo disco oculto entre la salida de grandes nombres con escasa inspiración. Tremendo el inicio del lp
Un muy buen disco, estoy alucinado, no esperaba un disco como este a estas alturas, grandes canciones, gran texto como siempre el tuyo. Saludos
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