Imagina un mundo alternativo. Imagina a la familia Cash emigrando a Australia debido a la debacle económica que sufren los Estados Unidos tras estallarles el proyecto Manhattan en pleno medio oeste americano. Imagina hambruna y zonas masacradas que empujan a una población a huir de su hogar, a asentarse a miles de kilómetros de su hogar y rehacer su vida bajo un país y unas costumbres totalmente nuevas. Imagina una Australia agreste, dura, inmisericorde en ocasiones. Imagina a un Johnny Cash con veinte años, criado bajo el peso de un país que primero fue colonia penitenciaria, le encaja al chaval taciturno y lleno de contradicciones que seria el hombre de negro.
Imagina sus primeras canciones influenciadas por los locales de la época, sonidos terrosos, agrios, desérticos y cargados de una rabia eléctrica. Imagina todavía más, imagina que las bandas que se habrían de desarrollar en nuestra realidad en los setenta como Cold Chisel o AC/DC fuesen contemporáneos de Cash, imagina que Johnny se influenciase de los sonidos garrulos y hardrockeros de los susodichos, que fuese colega de Bon Scott, Jimmy Barnes o Angry Anderson. Imagina canciones como "When The Man Comes Around", "Ring Of Fire", "I Walk The Line", "San Quentin", "309", "Cocaine Blues" o "God's Gonna Cut You Down" tocada al estilo de Rose Tattoo, AC/DC o lo más macarra de Cold Chisel.
¿Puedes?
Si no, tranqui, ningún problema, aquí tienes a la banda de Baviera, Johnny Crash y su segundo álbum:"- Fight The Cause" disco que tras su obra de 2012: "Beyond The Highway To Hell", continua con su particular homenaje al músico de Kingsland.
Puro Rock N Roll garrulo y macarra. Guitarras con el Rank, rank, rank de Malcolm Young, el chorreton de voz de Angry Anderson y la necesidad de quemar las cuerdas de las guitarras como las carreteras interminables de Australia serian quemadas por ese Johnny Crash de un mundo alternativo.
Los miembros de la banda son los fans más acérrimos de las bandas australianas antes mencionadas. A estos músicos se les ocurrió la idea de combinar el sonido de sus ídolos Hardrockeros con la devoción que sienten por Johnny Cash. El resultado son las trece canciones de este "Fight The Cause"
Incluso la banda se atreve con Covers de Covers. El "One" de U2 y el "Personal Jesus" de Depeche Mode que Cash versionara los últimos años de su vida son revisitados aquí con una contundencia y ferocidad adictivas. "Ghost Riders In The Sky", "Ain’t No Grave", "Rhythm Stick" o "Man In Black" suenan como una locomotora acelerada. Una maquinaria engrasada por noches eléctricas, por alcohol, por rabia acelerada y ganas de quemar los escenarios y las orejas de todo aquel y aquella que necesite un Rock N Roll y le haga falta saltar, cabecear, mover los pies y tocar la Air Guitar con una sonrisa en los labios y gotas de sudor perlando el alma en busca del fuego que arde en los corazones de los chavales sea cual sea su edad. Y es que Hardy y Andy a las guitarras, Mike a la batería, Rooby a las voces y Skinny al bajo son madurillos llenos de pasión y fuego y la necesidad de llegar a esa cumbre a la que cuesta tanto llegar.
2 comentarios:
Cash SÍ estaría orgulloso de estos Crash. Un abrazo, caballero.
Sin escuchar el disco, solo con leer tus palabras, ya sabía como iban a sonar, y he acertado de pleno, ahora que soy inquilina de la cumbre, me siento a escucharlos que sí cuesta llegar pero yo voy a saborear la eternidad.
Un beso tras otro
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