sábado, 22 de febrero de 2014

Leadfinger: Cuando El Mundo Brilla, Las Canciones Más Hermosas Deben Ser Su Banda Sonora



Igual el problema, por llamarlo de alguna manera, de vivir una vida de asombros y maravillas, es que el hecho, no parece sorprenderme  como debiera.
Asusta la ostia.
Amanezco cada día viendo danzar estrellas rezagadas y constelaciones adolescentes mientras un sol de medianoche se despereza suavemente e ilumina mi vida con más luz y belleza de la que creo merecer.
Y me creo que esto es lo normal.

Y pienso que así es la vida y casi no asombra que no asombre.
Entonces esta maravilla se vuelve cotidiana y necesaria como el aire que respiro. Como la música y esos músicos que pasan por estas páginas. Con todas esas canciones maravillosas que provocan todas esas sensaciones tan gratas al alma.

Sé que he insistido mucho en el tema, pero recuerdo el tiempo en que un disco, una canción dejaba tu corazón colgado de sus notas horas y horas. Ahora, demasiada velocidad, demasiada información, demasiadas buenas canciones y músicos, con muy buenos discos, que pasan por las orejas demasiado deprisa.
Tal vez, deberíamos vivir al ritmo pausado e intenso de un continente. Y vivir una vida, al menos en lo concerniente a la música, a la velocidad de las derivas continentales.

Ser como Australia. Vivir al ritmo de sus tormentas, arrullado por sus mareas. Ser esa roca dura y terrosa como un tintero de puro ocre que dibuja y escribe personas, vida, canciones.
Poderosa, inamovible. Las canciones, como los sueños y la tinta huyendo de la comprensión. Y poder retener la pureza de la palabra, de la música, del deseo de magia que flota en el sueño. Esa pequeña victoria que uno puede poseer durante un sólo segundo en ese momento en que nada, precede a todo. Al beso, al rasgueo de las cuerdas, al pincel sobre el blanco a la pluma antes de arrancar un poema al alma.

Lo que sea que Australia posea, se lo transmite a sus habitantes. A aquellos que sienten, que necesitan contar y cantar su vida.
Al menos, algo así creo que ha debido pasarle a Stewart 'Leadfinger' Cunningham, el factotum de la banda australiana, Leadfinger. El cual creó a la banda en 2006 en la ciudad de Melbourne.
"No Room At The Inn" es el cuarto álbum del cuarteto. Y en él, Stewart Cunningham, Reggie Screen, Michael Boyle y  Dillon Hicks nos regalan once poderosas canciones cargadas de Rock N Roll, punteos apasionados, contundentes interpretaciones, coros gariteros y acústicas que sueñan con el primer amanecer del mundo desde sus playas.

El de Wollongong, no ha inventado nada. Es honesto en sus percepciones del mundo, de la vida que tiene, de los garitos y los conciertos que da ante cientos, nunca miles de personas. De que su música es apreciada y querida por unos cuantos que, desde luego, somos incondicionales. Y sabe que la vida son canciones que se cantan así, desde dentro a puñetazos emocionales o, como una caricia a la mejilla de esa chica a la que quieres más que a tu vida.
"You're So Strange", " Gimme The Future", "The Lonely Road", "No Room At The Inn" o la banda sonora que, ahora, escogería para mi vida ".The Wandering Man", hablan de vida en minúsculas y eso, las hace inmensas. Como las vidas de tantos que conoces, que quieres y a los que deberíamos dedicarle canciones y momentos cada día de nuestras vidas.
Canciones que nacen desde el útero de los sueños, que dicen sus primeros habitantes, que es Australia. Canciones que te hacen sentir menos sólo, algo más poderoso, que iluminan un poquito tus pasos por el mundo y te dan tinta para escribir, contar o cantar tu historia.


Leadfinger:The Wandering Man


Leadfinger:You´re So Strange





3 comentarios:

javierfuzzy.blogspot.com dijo...

Joder, leo tus textos y me da la impresión que si escucho las canciones me voy a quedar pobre en algo. Es una sensación parecida al sentir el paisaje por la mañana, con el sol hiriente, y al caer la tarde, en los momentos en que casi todo ha pasado.
Saludos,
JdG

Carolynn Underground dijo...

Es una bonita banda sonora la que pones a tu vida, no me acostumbro a esas conversaciones en las que desmenuzas cada sonido y sensación que te provoca la banda a la que acabas de escuchar, no quiero acostumbrarme nunca a ello TwoHeads, es un lujo maravilloso.
Besoxxx

TwoHeads dijo...

Gracias..¡Que mas puedo decir?..buena gente diciéndote cosas bonitas