martes, 10 de diciembre de 2013

Frank Turner: Como Árboles En Invierno




Será el incipiente malestar que parece que poco a poco se va apoderando de mi. O tal ese hartazgo que en ocasiones me consume. Pero, cuando los días se vuelven gris franquista. Cuando mirar hacia adelante es un ejercicio de pura prestidigitación, es cuando más necesario veo ponerme en pie, aunque sólo sea por un minuto y mirar hacia adelante con orgullo y deseo de permanecer así todo el tiempo que sea necesario.
Reflexionas un poco y te das cuenta que este país es una puta mierda. Que hemos hecho de él un saco de ponzoña adocenado y carente de orgullo. Los hemos dejado ganar. Aunque supongo que algunos diréis que siempre han ganado y, probablemente sea así. Pero enfrentar tu vida a esa insana percepción de que algo se ha roto, irremisiblemente....jode mucho, la verdad... Estamos enfrente de uno de los peores males. Uno poderoso. Uno que atenaza el alma y provoca esa sensación de que todo es aquí y ahora. De que nos jugamos todo a la carta del presente más inmediato.
Le dan a la vida un viso de verosimilitud, pero, eso, no es la verdad, no lo será nunca. Por mucho que el espíritu de Goebbels se empecine en ello. Eso no es más que una atmósfera, un decorado para ese pantano inmoral que es el hoy y el ahora.

El mal que ellos propagan es contaminante, es infeccioso y alberga una poderosa metástasis de la que casi nadie puede escapar.
Olvida aquel concepto kantiano de moral: "Encima de mi, el cielo estrellado, dentro de mi, la ley moral". 
Nos han pillado. Estamos, la gente que aún piensa más allá de si misma y sus necesidades primarias, contra la pared. Y ya no hay más. Cuarenta años de franquismo y treinta y ocho de propina...y sigue contando.

Por ello me agarro a lo poco honesto y real que existe al alcance de mi mano y de mi corazón. Autores que me dan esa luz, que impulsan mi sangre a correr como un torrente. Personas maravillosas con una perspectiva de la vida fascinante. Tú sabes que hablo de ti, sobre todo de ti. Un horizonte siempre creciente, plagado de luz y esperanza. Tú me enseñas que el futuro es manejable pero la vida es imparable. Y, cuando tropiezo en un punto, me tranquilizas y me dices que la vida se ocupará de empujarme hacia otros caminos. Tú has reforzado en mi la seguridad de constatar que quien hace el ridículo son los que tienen miedo de hacerlo, no los que tenemos un corazón saltimbanqui. 
Gracias a ti, a gente como tú, sé que coger una pala y ponerse a cavar, como hace Frank Turner, otro al que comprendo y me es necesario, no tiene nada de extraño ni necesita de una absurda justificación. Lo hacemos porque en nuestro interior, ha crecido la necesidad de hacerlo.

Turner sacó este año un delicioso y adictivo álbum:" Tape Deck Heart" con veinte canciones, dependiendo de la edición que te pilles. Y, no contento con eso, tiene en el mercado un documental: " The Way I Tend To Be" y este EP de cuatro deliciosas canciones titulado:"Losing Days".
Los días se han vuelto de hierro y oxido. El futuro parece un guantanamo mezclado con "Bienvenido Mr. Marshall" y las batallas se van diluyendo en la pena, el cansancio y el hartazgo, Pero seguimos ahí, debemos seguir. Hay gente que permanece de pie, "El Drogas", es uno de los más intensos y mejores ejemplos. Y personas anónimas, gente que aprieta el puño y los dientes.
Por ello, debemos transmitir ideas que pervivan. Y no sólo con lecciones sino con el ejemplo.
Somos árboles en invierno, quebradizos y desnudos...pero permanecemos en pie.









4 comentarios:

bernardo de andres dijo...

Sigue los caminos de su padrino Billy Bragg pero a diferencia de este me parace más compacto en sus últimos trabajos. Estos temas muy rock américano ver Counting Crows

Carolynn Underground dijo...


Frank Turner es alguien a quien admiro, no podría compararlo con nadie a no ser sea con gente como el Drogas, sus letras son verdades que molestan gritadas a contra viento y yo he tenido la puta fortuna de cantarlas a pleno pulmón junto a un corazón que late imparable.
Sé que te dejas cuidar... No es solo mantenerse en pie, es sentirse saberse en un lugar que uno mismo se ha creado en la vida, una gripe se cura con descanso, mimos, con el cariño de tu gente pero un alma vacia, solitaria y podrida...morirá en la más absoluta pobreza emocional, y no hay nada peor en la vida que verse solo y apartado...repudiado.
Demasiado franquista en la corteza.

Jorge García dijo...

Pero tu sabes que la clave es la esperanza, si se tiene antes o después se vence, y desde luego nunca se pierde del todo, y eso que lo que dices es cierto, jodidamente cierto, pero los tipos firmes, como tu, los que huyen del efecto de esa dormidera que es la TV y la modernidad y que se saben en el camino, si como es tu caso, además andan cogidos de la mano, de la mejor mano, su caminar no lo para ni Dios, aunque sea individualmente no sabran lo que es sucumbir, asi que adelante...Yo llevo tiempo con este disco colgado en mi blog en el apartado discos con los que ando liado estos dias...me encanta este tío, folk-punk dicen, pues será, a mi me pone la ostia este elemento, y tiene discos mejores que este...
Abrazo

RAFA dijo...

recuerda "always see the blright side of life". Esos dias oscuros, se volveran claros antes o despues. Animate. un abrazo,