Hubo una vez un chaval de 16 años para el que la música fue una tabla de salvación en un océano tempestuoso, cambiante, oscuro y aterrador.
El chaval tenía un ego, no
obstante, más grande que el monte Olimpo de Marte. Lo que le empujaba a buscar
discos y más discos, bandas y más bandas. Y no se conformaba con lo accesible y
fácil de encontrar. El ego del muchacho era tan voraz que, hallar ese álbum extraño que sólo conocían tres
tipos en aquella ciudad rancia, gris, postfranquista y llena de miserias
morales y prejuicios, era una necesidad, casi, vital. Así, sus pies y sus orejas se movían hacia bandas como
Hanoi Rocks, de Finlandia, April Wine, Triumph, Riggs y Rush de Canadá. Y Krokus…de Suiza.
Y es que el chaval estaba
alucinado ¿Suiza? ¿Había grupos de Heavy…Había grupos de Rock, incluso, en ese
país? ¡¡Joder que si!! Krokus era una
banda con unas hechuras AC/DC, merced a su cantante Marc Storace.
Fundada en 1974 como una banda de
rock progresivo, tras ver a los Young y compañía, se abalanzaron hacia sonidos
Hard. “Metal Rendez - Vous” fue, para ese chaval, sencillamente, glorioso.
Después vendrían 16 discos más y, para la vida del chaval, cientos de bandas,
cientos de discos, nuevos estilos musicales y sonidos que elevaron el alma del
chico por encima del mar de mierda en el que chapoteaba, en ocasiones,
angustiado.
Pasados los años, muchos; el
chaval ha ido rodando y tambaleando, que cantaba McKinley Morganfield,
en la vida. Con luces y sombras que le han conformado esta vida que ahora es.
Y, de repente, su sonrisa ha estallado en la cara al escuchar, fíjate, el nuevo
disco de los suizos: “Dirty Dinamyte” recién salido al mercado y con doce
puñeteras canciones que son puro Rock N Roll. Sí, mi muy querido amigo. Sin prejuicios, sin estanterías,
sin encasillar la música en ningún lugar que nos empuje a obviar las buenas
cosas, sólo porque no nos encaja en nuestra estética musical. Los Krokus se han
marcado un álbum de la ostia. Acercando un sonido que nadie reprocharía a
gloriosos y adorados músicos como Dan
Baird, caso de la canción que da título al disco o “Yellow Mary”. “Halleluja Rock n' Roll” o “Let The
Good Times Roll” que
son puro AC/DC. “Help” que, perfectamente podrían haber cantado Spike y
sus Quireboys.
Y es que Chris von Rohr batería desde
(1975-1977), Voces desde (1977-1979) y Bajo desde (1979-1983, 1987-1989, 2008 y
hasta el presente) ha producido un discazo lleno de energía y pasión. Un
discazo construido por amor a la música, por cariño al Rock N Roll y con ganas
de hacer vibrar a la gente sin pretender, creo yo, triunfar o dejar una
impronta indeleble en esto del Rock.
El grupo está formado, además de
por Von Rohr, por Fernando von Arb Guitarras desde(1976-2004, 2008 y hasta el presente),Marc
Storace Voces (1979-1988, 1994-1996, 2002 y hasta el presente),Mandy Meyer
Guitarras (1981, 2004-2007, 2012y hasta el presente) y Mark Kohler Guitarras
(1982-1988, 1994-1996, 2008 y hasta el presente). Buenos amigos, creo yo,
además de profesionales del Rock.
En esto de los sonidos que nos
envenenan el alma, a veces, nos dejamos llevar por prejuicios que en nada nos
ayudan a crecer y, sobre todo, nos hace perder álbumes de la calidad de este “Dirty
Dinamyte” que aporta eso que estás buscando, sea lo que sea, pero que, seguro,
te llena la vida de esa luz, esa rabia, esa fuerza, esa pared cayendo que tanta
falta te hace. Y dime ¿necesitamos algo más?
3 comentarios:
Pues si, Rock N Roll del bueno!!! Estos señores se han cocinao un disco que muchos ya quisieran ¡¡¡joder que si!!!...guitarrazos y buen rollo, esto es lo que transmiten, no hay una sola canción que sea de relleno, todas, absolutamente todas no tienen desperdicio querido lado cuerdo de ese cerebro.
Buen finde!!!
Aunque no inventen nada nuevo, cuanta falta hacen discos así, de energía y que te hagan mover el culo del asiento. Me está gustando mucho.
Me encantan, precisamente ayer estuve pinchando en casa el "Alive and Screamin'" y lo disfrute de veras...
Este mas de lo mismo.
Saludos amigo.
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