miércoles, 25 de febrero de 2015

The Satisfactors: Espíritus Del CBGB


El escritor norteamericano James Ellroy supo captar en su tetralogía de Los Ángeles el ambiente de posguerra que vivió la ciudad tras la segunda gran guerra. Los 40 y 50 eran desgranados con una maestría adictiva y en cada descripción y escena te envolvía el ambiente de la ciudad, del pensamiento y los actos de la gente del momento. Esto viene a colación respecto de la habilidad que tienen algunos autores para hacer brillar e invocar los espíritus que flotan en el aire y en el tiempo y transportarnos a ese momento preciso y precioso. Y es, precisamente un momento precioso el que este maravilloso cuarteto de New Jersey, The Satisfactors, hace revivir en cada nota de cada canción de su acojonante álbum debut. 
Sudores rocakanroleros, creatividad, intensidad, rabiosa energía, y ese momento único e irrepetible en el que sientes que estás haciendo historia. Así, imagino que se tuvieron que sentir los músicos, promotores, dueños y público que asistió enfervorizado y pasado de vueltas al mítico CBGB's OMFUG de New York.  club emblemático del Punk rock y la New wave, donde los hubiere ubicado en el 315 de Bowery entre la 1ª & 2ª Calle en el Lower East Side de Manhattan. Las iniciales CBGB's significan Country, bluegrass and blues por los estilos que allí se tocaban inicialmente; y OMFUG Other music for uplifting gormandizers, que significa "Otra música para nacientes consumidores". Y de esa "Other Music" que hizo temblar los muros del local, The Satisfactors sabe mucho. Poderoso Rock and Roll de tintes eminentemente setenteros y neoyorkinos. Punk-Rock, Glam-Rock y todo eso que es sinónimo de sudor, baile, macarrerio y ganas de desfasar dos putas horas de una vida que, en ese tiempo, deja de ser tan puta.

Los cabrones estos se han marcado un discazo de esos que te arrancan las costras del espíritu..¡perdón, del alma!, que me he pillao un diccionario de sinónimos y antónimos y me obceco.
Un Rock and Roll intenso y correoso. Cargado de electricidad y un amor por los cinco últimos años de la década de los setenta que, a este que escribe, le pinta una sonrisa en el carile.
Bruce Ferguson de The Easy Outs,a la voz. Jimmy Target, alias Gar Francis de The Doughboys a las Guitarras, Piano, Organo y coros.Curtis Roy, alias Kurt Reil de The Grip Weeds a la batería y los coros. ¡Y el puto Kenny Aaronson al bajo!de, espera: The New York Dolls, Joan Jett,, Bob Dylan, Billy Idol, Michael Monroe, Brian Setzer, Graham Parker y Rick Derringer y uno de los mejores bajistas de la historia. Y aquí, permitirme alucinar. Antes de que el carnal Dirty me pasase, siquiera el álbum y yo conociese a la banda, me desperté un día con la asombrosa linea de bajo de "Beyond the Universe" canción incluida en el disco debut de Rick Derringer en 1976 que contiene maravillas como "Sailor" o "Let Me In". Beyond, como todo el disco,cuenta con la digitación poderosa de Aaronson y, destino eres un ente curioso, mira por donde, me lo topo en este maravilloso disco de estos jovenzuelos cincuentones haciendo lo que mejor sabe hacer, elevar una canción al séptimo infierno del Rock and Roll; y mira que hay canciones cojonudas para elegir en este disco. la, logicamente, ramoniana "Johnny Commando", dedicada al guitarra de The Ramones, Johnny Ramone, la acojonantemente Kissiana"Sweet Sunshine" o como se puede elevar el espíritu de los mejores Kiss de los setenta en tres minutos y treinta y ocho segundos. El sonido New Wave de la encantadora "Take Your Troubles Away", el macarronerio putarrón de los amigos Thunders Sylvayn y Johannsen de "Hit me,Hit me,Hit me" o el homenaje a l Rock and Roll de la gran manzana, descrito maravillosamente en "Gimme My Rock And Roll".

¿Se nota que me gusta el puto disco? ¡Joder, es que yo me he criado con toda la sangre que suda cada tema del disco! Coros locazos, guitarras que hacen arder el alma, canciones desafiantes, superficiales y exentas de toda necesidad de transcender. ¡Rock and Roll damas del arroyo y caballeretes! Belleza de callejón, poesía de vertedero, amor de escalera a punto de derrumbarse y el sudor de sentirse vivo, rabioso e infantilmente vivo.
Y, joder, no necesito más.

The Satisfactors:Hit Me Hit Me Hit Me

The Satisfactors:Johnny Commando

The Satisfactors:You´re so Crazy


domingo, 22 de febrero de 2015

Rafa Pons: La Sonrisa Que Duele Solo Al Besar



Me toca un poco los huevos Rafa Pons. Sus letras, esa actitud canalla y pasada de vueltas, el vitriolo y la ironía que se vuelve sarcasmo asesino y frases lapidarias de esas que o bien te tienen dentro o te desprecian desde sus adentros a ese misero y penoso afueras en el que estás por no tener los cojones para meterte dentro, a empujones y metiendo tripa por las que puedan estar mirando.
Me toca los cojones el Pons porque esa parte mía que no es ni será sus personajes, envidia, un poquito, la manera desenfada y definitiva en que bailan la vida unos personajes que no son más que caratula, pose y literatura y la necesidad de epatar y soñar con una vida golfa y canalla que ni cristo es capaz de mantener, bien por pasta o por incapacidad física y de salud para aguantar el tute.

Y, es cierto, me toca las glándulas seminales el Rafita por ser capaz de hilar palabras y frases que rezuman una poesía y una ternura que abochornaría a sus personajes.  Temas con gracia, que no graciosos, temas con la pena estrangulada del perdedor del que mucho sabe su colega de batallas Dani Flaco, otro que tal, temas, de amor y, sobre todo del desamor que sobrevuela el alma del que siente, del que quiere y le jode perder, pero que parece necesitar jugársela constantemente apostando al negro.

El cuarto álbum del barcelonés, "Disimula" nos apedrea con catorce canciones donde están las calles  pateadas y queridas por Pons. El golfo que vacila con juegos de palabras, el que pierde el amor, el que necesita de un amor para, luego, cagarla y perderlo para hacer una canción bonita, triste y llena de obviedades, de esas que te dan la razón cuando lo necesitas.

Rafa Pons:cantautor y abogado, podría poner en su tarjeta de visita. Si el veneno de la música se hubiera ventilado su vocación laboral y le hubiese empujado a una vida de conciertos, palabras y frases que se marcan a  fuego en los huevos del alma.
Dice el de Barna respecto de su disco:"Disimula pretende ser más tranquilo que Persona, animal o cosa(su disco anterior) pero creo que al final se le escapa mucho más veneno de lo que pretendía. Son canciones de gente que intenta hacer las cosas bien pero te quedas un poco con la duda de si lo han conseguido. Persona era más ibuprofeno, Disimula más omeprazol."
Y el nota se  queda tan ancho. Si, desde luego que hay veneno y barullo, y jaja y buabuabua, pero hay miradas más cercanas a vidas que te rozan, a veces demasiado, caso de "Diles", y es que, ¡joder!, echaba de menos algo que reivindicase ese apunte social que ya sentí en canciones como "Mi Generación Es Una Mierda" o confesiones escondidas, "La Fiesta En Paz", "El No Que Ya Tenia" o "Amores Binarios".
En "Disimula", lo canalla convive, o se soporta más o menos bien, con lo reflexivo y es capaz de crear bellezas musicales cantándole a las relaciones cotidianas, a las que desnuda en sus más patéticas victorias y sus gloriosas derrotas.
Vaciladas como "En Ti", "Estupenda" o "Follón Kilombo" te harán sonreír y resaltaran la cicatriz del ¡ay como duele la vida coño!que tanto te crees que les mola a ellas.
Para mi es un buen rato, música de autobús, a la que se le escapan dos jaja y lapos de poesía que recibo con la boca abierta, porque tengo mucho vicio.



domingo, 15 de febrero de 2015

Will Hoge: Middle Of America


Adelanto de lo que para los tipos de este blog es un buen amigo y un gran músico..
Comencemos, pues, a soñar.

(Dirty..Para que no digas que todos los post son largos)

sábado, 14 de febrero de 2015

Historias De Amor


Extraño como empiezan las cosas. El que mañana sea ese día obligatorio donde el amor está en el aire es algo que en la vida me ha preocupado. Sin embargo, el destino sopla sus vientos de un modo caprichoso y juguetón, empujando mi vida hacia lugares que no pensé pisar jamás.
Ese mismo destino ha puesto hoy, viernes, unas cuantas palabras, sentimientos vueltos tinta. Alma y sangre sobre nieve de papel y, ¡coño, mírame! aquí estoy, escribiendo un post sobre el día de San Valentin.

Iba a empezar este post diciendo que me hago viejo. Pero no es cierto. No me puedo hacer viejo. Si  acaso, me lo quiero poder creer. Y, la verdad, no me lo creo. Así que optar por achacarle a la decadencia física y a una severa neumonía sufrida hace poco que puede haberme dejado las defensas y mi buen gusto bajos, es tan tonto como cualquier otra ridícula y absurda excusa.
Joder, San Valentin y su puta madre. Celebraciones de grandes almacenes, corbateros y relojerías y todo lo que se os pueda ocurrir como poderosa y postmoderna excusa para eludir sensaciones, sentimientos y la cháchara y el blablabla circundante. Pero, al margen de todas las tonterías, el amor es. Y existen sentimientos tan poderosos, indescifrables y arrolladores que a uno, en su pequeñez emocional, lo dejan clavado a unas palabras y a todo el universo que encierran las frases de amor y complicidad que una persona puede y necesita expresar a otra.

Hay dos cartas, pequeñitas, intensas, arrolladoras que Johnny Cash escribió al amor de su vida, June Carter que expresan, mejor que toda mi necia palabrería lo que es el amor.
Y hoy por ser hoy, me permito el lujo de ser un moñas, más blando que la mierda de pavo, y boquiabrir mi corazón ante eso que llaman amor.

 La primera es por el cumpleaños número 65 de June y la segunda fue un poco después de su muerte en el 2003. Cash murió pocos meses después de que ella se marchase. Incluso en estas casualidades, esta poderosa historia de amor es hermosa y está cargada de algo extraño y casi milagroso.

Junio 23, 1994
Odense, Dinamarca.

Feliz cumpleaños Princesa,

Nos hacemos viejos y nos acostumbramos el uno al otro. Pensamos parecido. Nos leemos la mente. Sabemos qué quiere el otro sin preguntarlo. A veces, nos irritamos un poco el uno al otro. Tal vez, a veces nos damos por sentado.

Pero hay ocasiones, de vez en cuando, como hoy que lo medito, me doy cuenta de la suerte que tengo por compartir mi vida con la mujer más extraordinaria que he conocido. Todavía me fascinas y me inspiras. Me influyes para mejorar. Eres lo que deseo, la razón número uno en la tierra para mi existencia. Te amo tanto.

Feliz cumpleaños, princesa,

John.

Julio 11 2003
Mediodía

Amo a June Carter, claro que sí. Sí, claro que lo hago. Amo a June Carter, sí lo hago. Y ella me ama.

Pero ahora ella es un ángel y yo no. Ahora ella es un ángel y yo no.


viernes, 13 de febrero de 2015

Jack Savoretti: Post Número Ochocientos


Mirar para atrás. Ese acto que, conforme pasan los años se hace más habitual que mirar hacia adelante. Nostalgias, melancolías, partidas de la vida inconclusas...tiempos pasados que, dicen, siempre fueron mejores.
Y, joder, 800 posts. Miles de palabras, cientos de miles de letras. Y repeticiones y repeticiones y riki-raka, riki-raka con lo obvio. Peloteando la emoción hasta lanzarla contra esa pared formidable que se llama música y esperar que ésta te la devuelva más intensa y apasionadamente.

800 posts nos contemplan con este flamante y recién salido álbum del italo-británico Jack Savoretti:"Written In Scars". Mirando hacia atrás, recuerdo haber escrito un bisoño texto el ocho de diciembre de 2009 respecto de su segundo disco, "Harder Than Easy". Y haría lo propio el ocho de junio de 2012 con su tercer obra, "BeforeThe storm".
Y aquí estoy, ochocientos discos y canciones y libros y pelis y comics después con una nueva obra de un músico por el que siento cierta debilidad emocional que hace que ignore ciertos arreglos horrorosos que revolotean por las once canciones del álbum. Y obvio ese aburguesamiento mass-media de las canciones y una cierta ausencia de guitarras limpias, madera y cuerda, alma y sentimiento que han sido seña de identidad de Savoretti desde su maravilloso inicio discográfico, "Between The Minds" que en este cuarto disco no alcanzo a sentir hasta "Broken Glass", su cuarta canción,la cual, aún así...

Las letras del músico también han experimentado cierta evolución, o, al menos, han empezado a tocar otro tipo de temas abandonando unas señas de identidad que asociaba con el autor desde siempre. , hay menos dolor, menos de esa tristeza honesta y cargada de horizonte. Y también menos romance, menos amor apasionado, tormentoso y cargado de dramáticas metáforas y lugares conocidos.  En este disco, ha quedado reemplazado en cambio, con la obstinada determinación de un hombre con un mensaje. Lo cual no impide bellezas marca de la casa como " Nobody 'Cept You" o "Wasted" o esos sonidos tan Rootsy y cargados de sonidos que plantan sus semillas en tantos estilos y sonidos queridos por mi como "Written In Scars" o "Fight 'Til the End".

Curiosamente, las versiones desnudas, cargadas de acústicas y ganas de crear sonidos envolventes y cargados de pureza y pasión que se ven en algunos vídeos que el músico ha grabado como presentación del álbum suenan infinitamente mejor que las versiones definitivas de la obra. La prueba de ello la tenéis abajo.

 Y entonces, ¿porque no celebrar los ochocientos posts con algo más acorde al sentimiento de este que suscribe? Bueno, porque en realidad, ochocientos simplemente le sigue a setecientos noventa y nueve y precede a ochocientos uno. Y el tipo este me cae bien y me siguen gustando sus canciones aunque este disco nunca estará entre mis favoritos y, desde luego, no será de lo mejor del 2015, no obstante, sirva  el cuarto vídeo como homenaje a mi mismo.
Para el post ochocientos uno Rock and Roll, ¡que coño!





martes, 10 de febrero de 2015

Sugar Sugaar: La Prostituta Más Hermosa Del Burdel Se Llama Rock And Roll


Recuerdo décadas pasadas, cuando esta ciudad era aún más garrula y rancia de lo que hoy en día es. Recuerdo el "sotacaballorey" estético y emocional. el caldo de cultivo pegajoso y degradado donde chapoteaba el orgullo ridículo de creerse algo sin más respaldo que el ser de aquí, que era lo más. 
El paletismo de rolex y misa, de puta y orgullo decadente, de ecos de botas militares pisando la esperanza y la necesidad de un mañana mejor resonando entre procesiones de semana santa y bares atestados de castas y alcohólicos encubiertos.

Y la ausencia de color. Y el predominio del gris, de la luz cayendo al abismo necio y egoísta de lo inamovible, del sentimiento petrificado, del pensamiento esclerotizado.

Y recuerdo, también, la necesidad que sentía de pintar días y noches del color de la locura que provocaba la música en mi. La búsqueda incesante de aquello inasible, de la canción atisbada en un bar, de la que se colaba en radios demasiado parecidas a las de ahora. De un disco que un colega de un colega de otro que había estado en Londres o en París se trajo para mi envidia y necesidad de hacerme con ello. Y como ese grupo, esa canción, me llevaba a otro y luego a otro y después la sonrisa, la rabia en el baile loco de punteos con escoba y escaparme del mundo, de mi mismo, de mi destino.

Recuerdo cuando compré al Napo en Kilkir Diskak el primer álbum de The New York Dolls. Recuerdo mi fascinación rabiosa al mirar a aquellos engendros malencarados que se vestían como putas de cinco dolares la mamada. Recuerdo que eran la antítesis de mis adorados Kiss. Todo lo que en la banda de Criss, Frehley y los otros dos usureros era brillo. oropel, estrategia musical y pose,(cojonudamente hecho todo) en las Muñecas de Nueva York eran callejones oscuros, una amalgama musical pisoteada al lado de cigarros con pintalabios en las boquillas, y peligro y realidad y verdad y tensión emocional y una rabia que los Kiss nunca fueron capaces de crear.
Y el mundo cambió. Y las canciones de Mink Deville y Jim Carroll y Ellioth Murphy y tantos otros se colaron en mi alma y nunca me han abandonado.
Después vendrían Hanoi Rocks y Dogs Dámour y ese pedazo de mi vida que reservé en su momento para las huestes de Johnny Silvers se volvió un garito necesario para que mi alma se escapase de cuando en cuando a despedazar la lógica, a morder los labios de la vida con rabiosa lascivia y a sudar puto Rock and Roll de tres acordes y letras repletas de perdedores y amores mentirosos, de borracheras y psicotrópicos.

Recuerdo ir dando tumbos y bandazos estéticos buscando a mi modo un reflejo de rimmel y camisas blancas y chalecos negros y guardapolvos y pendientes y anillos...y constatar que para ser un chico glammy había que ser un tirillas y no un gemelo del Kurgan. Aún  así, buscaba el modo de parecerme a Johnny Silvers. De bailar y desgañitarme con las canciones del Junkie por antonomasia del Rock and Roll...Esas canciones tenían algo mágico.
Y, joder como me alegra dar la bienvenida a ese garito infecto a los franchutes de Sugar Sugaar. Un cuarteto que bebe de todo lo bueno y perverso que es capaz de crear la adicción a músicos underground de la talla de los Dolls.
Sugar Sugaar está, espero, a punto de sacar su primer larga duración. Antes se marcaron un delicioso EP titulado "The Sweet taste Of Rock n´Roll", seis canciones que se mueven por un Nueva York de los setenta con una elegancia y una naturalidad pasmosa. Las tres canciones que la banda m,e hizo llegar, demos de lo que será su disco, también caminan en esa dirección, permitiéndose besos con lengua a Mink Deville, caso de "Magic Moments".
El factotum de este travelo rockanrolero es un tipo que atiende al nom du guerre de Oli Le Baron y entre sus batallas ganadas figuran hechos tan atractivos como tocar con  Jean-Louis Aubert  de la mítica banda francesa Telephone o realizar una gira por los Estados Unidos con Sylvain de New York Dolls en 1992 y 1993,amén de colaborar con Sylvain en su disco "(Sleep) Baby Doll de 1998.

Junto a Sickyy Lyo a la guitarra y Mi Madssen al bajo son la sangre que chorrea  y el músculo que suda Rock and Roll.
Sus canciones son intensas, sinceras, macarras y engreídas al modo único y poderoso que el Glam Rock barriobajero recrea en obras cortas y rabiosas, como un polvo en la trasera del bar más cochambroso del Village neoyorquino.
"Lonely in Heaven", "Stoned", "Sweet City", "Magic Moment" poseen una energía que nace de las tripas y la mala ostia de estar vivo en este siglo que trasmite tanta confusión y tanta fascinación.
La única pena es lo corto que se hace la escucha de las nueve canciones que la banda ha publicado hasta ahora. Se tercia, pues, la necesidad de reclamarles para ya que se dejen el alma en ese disco al que ya estoy deseando echarle el corazón y las orejas.
Sugar Sugaar damas y caballeros..Y esto solo es el principio.

Sugar Sugaar:Stoned

Sugar Sugaar:Sweet City

Sugar Sugaar:Magic Moment





domingo, 8 de febrero de 2015

Temperance League: La Magia Y El Alma Del Rock And Roll


La música me sigue dando suelo bajo los pies, dirección en la que enfocar mi mirada y mi ánimo para buscar ese algo más grande que yo mismo y ofrecerme la magia de reinventarme en tres minutos y pico en alguien mejor, y preñarme del deseo de ser grande, trascendente, mítico.
Pero no toda la música posee ese mojo único, profundo y misterioso que rehace el corazón y fuerza a los huesos y al músculo a volverse heroicos, incansables y cargados del impetus feerico que hace trascender cualquier gesto, cualquier palabra y volverla mágica, intensa y cargada de las mejores promesas.

Necesito, de maneras a veces desesperadas, emocionarme como un puto crío con un mundo inmenso para jugar, o como un  anciano al que le quedan horas, tal vez días de vida y necesita ese último beso de amor, intenso y sincero, ese último amanecer, esa última canción que le haga soñar para una eternidad que cabe en siete notas.
Y, ¡joder! escucho muchos discos, muchas canciones, pongo mi alma en dejarme llevar por el sonido, las palabras, la actitud..y es tanto el abatimiento que a veces siento, tantas las veces que la ilusión se desvanece que me miro con una misericordia que masca el tabaco del desprecio y que piensa que, merecidamente, pido a gritos un lapo. Pero, entendedme, la música es tan grande, tan poderosamente intensa y necesaria para mi que arrastra mi vida entera con ella, la empuja a buscar la emoción como se busca el oxigeno si se está en el fondo del mar. Y cuando falta el alma, la música se vuelve tan fría y exenta de vida como la superficie lunar.

Y entonces, una brizna de aire, una bocanada de la más rabiosas de las tormentas me envuelve, se me lleva, arrastra mi penosa alma hacia lo más alto donde falta el aire porque todo es música, todo es viento y Rock and Roll. Y llueven sobre mi diez canciones que me dan vida, y rabia y una emoción que hace que todo lo que veo brille con una intensidad que solo puede ofrecer una canción.
Y entonces el nuevo álbum de una banda de Charlotte,  Carolina (¡ñam!) Del Norte, los  Temperance League, estalla ante mi vida y le da un sentido.

"The Night Waits" es una puta maravilla cargada de la magia y el alma del Rock and Roll. Sus diez canciones poseen ese algo que algunos llaman sueños y esperanzas que pueden verse reflejadas en canciones que hablan de tus sensaciones,de tus sentimientos y que, muchas veces las trascienden y las hacen crecer.. En los temas del disco, brillan intensas, las huellas de los grandes, Bruce Springsteen, sobre todo, se siente como una tormenta lejana que hace reverberar los truenos propios que Temperance League crea mágicamente en temas como "Land of Opportinity",  la deliciosa "Neon Lights", la poderosa "Why's It Gotta Be So Hard", la preciosa " Feels Like Home", "Lonely Time" o la que da título al disco. Definitivamente, las diez canciones del disco poseen esos pedazos de barro fresco y vivo que son humedecidos por la lluvia fresca y el mar rabioso que pueden crecer en New Jersey o en Charlotte.

Lo que ofrece la banda de Carolina (¡ñam!) Del Norte es una dirección hacia esos lugares que son, de verdad, más grandes que la propia creación y sus creadores. Ese garito donde la verdad del mundo y todos los misterios de la vida y el universo se desvelan con un trago mientras una banda roba pedazos de fuego al mismísimo infierno para hacer arder las almas durante tres minutos y pico.
Eric Scott al bajo, Jay Garrigan al piano y al organo Hammond, David "DK"Kim a la batería, Bruce Hazel a la voz, Shawn Lynch a las guitarras y coros y Chad Wilson a las guitarras y voces forman un grupo sólido y  empastado que se recrea en todo lo bueno y grandioso que tiene el Rock and Roll. Y  en este tercer disco, después de su maravilloso "Rock And Roll Dreams" de 2012, demuestra que la apuesta que se hizo en este blog por ellos no era una casualidad fruto de la inercia de encontrar música en el mundo de la música sino que se sabia y se sentía que Temperance League eran, y son, grandes, muy grandes..como la música.

Temperance League:Neon Lights

Temperance League:Lonely Time

Temperance League:Why's It Gotta Be So Hard





jueves, 5 de febrero de 2015

Ted Wulfers: La Felicidad Es Un Ukelele


Me regalaron hace días una sonrisa. Si, tengo los huevos de empezar un post con un topicazo de esos que rayan lo nauseabundo.
Me regalaron una sonrisa y quince canciones que empujan a sonreír. Quince temas cálidos y vacilones, de esos que muchos músicos parecen guardarse para sus días de cumpleaños, no vaya a ser que se me joda la pose de tío duro, o torturado, o serio, o concienciado.
Pero estas canciones, de ¡ji! fácil y tontorrón, de mares serenos y azules, de playas acogedoras e interminables, chocan como dos expresos siberianos en una carrera suicida hacia tierras cálidas en días gélidos como los que se han cernido sobre nosotros en estas semanas. Nos arrebujamos, aún más hondo en nuestras múltiples capas de ropa y seriedad y olvidamos que el mar siempre está cerca, que el sol nunca es una promesa sino una certeza y que su calor está escondido en una sonrisa, en un abrazo, en una canción.

Quince temas de playa y sombrilla, de calor y risa de temas que no van a ningún lado, ni a la esquina a por un mojito, sino que albergan la luz y el calor del sol en cada nota, en cada estrofa y poseen pedacitos de poesía y amanecer en las esquinas de cada canción.

A finales de noviembre del año pasado, el músico de Chicago pero angelino de adopción, Ted Wulfers, sacaba a la luz (del sol) su octavo álbum:"You Are Here", Un, delicioso compendio de canciones luminosas y llenas de sueños de noches de verano. 
"You Are Here" es, en palabras de Wulfers un disco de Rock N Roll ukelele. Y, es cierto que el instrumento que predomina en la música de las islas Hawái, Tahití e Isla de Pascua, se pasea por cada tema del álbum como un crío de cuatro años correteando entre notas y versos. Pero también es cierto que la versatilidad del músico multinstrumentista se cuela por todas las rendijas de las canciones y los pianos, harmónicas y maravillosos coros femeninos impregnan los temas del disco con una liviana, cálida y ensoñadora luz veraniega.

El tipo podría grabarse el disco solo, no en vano toca la batería, la guitarra, el piano, el bajo, el ukelele, el órgano , el Pedal Steel y el Lap Steel, el Dobro y canta de cojones; Peeerooo, una de las cosas más bonitas del disco, es la interrelación que existe entre Ted y los músicos que colaboran en la creación e interpretación de sus canciones, "Find Some Peace", "Lucky Guy", "Cat In The Window", la vacilona y tierna versión del "Dont Worry Be Happy" de Bobby McFerrin en hawaiano, "Lau Wiliwili Nukunuku 'oi 'oi", la hermosa "Even Hula Girls Get the Blues" la luminosidad de "Somethin' Special o "That Old Song" invitan a  sonreír, a exhalar el aire retenido en el pulmón y en el alma dejarse llevar por la brisa y por la risa, a no pensar tanto y a sentir más.

Ted Wulfers nos ha regalado un trocito de verano, del mismo modo que regala canciones. El tercer vídeo que os muestro (debajo mismo de este tocho) es una canción que compuso para la audiencia, diecisiete minutos antes en un concurso vacilón donde los haya en los a los músicos les dan un título y, a partir de ahí, deben desarrollar una canción en la mayor brevedad posible. 
Ese es Ted Wulfers, regalando canciones y sonrisas, de las cuales, afortunadamente, a mi me regalan un montón...Soy un cabrón afortunado.




domingo, 1 de febrero de 2015

James Maddock: Soñando Con Horizontes


La noche trae hermosos regalos. La noche y la tecnología se confabulan para regar el corazón cansado y el alma errabunda y necesitada de magia con gotas de tormentoso Rock and Roll.
El sueño de Tesla, la ciencia al alcance de todos para lograr que crezcan nuestros sueños, que crezcamos nosotros como seres humanos o, al menos, que pugnemos por elevarnos por encima de la miasma adocenante de la masa y soñemos con música, con las canciones que canta la realidad, el universo y todo lo demás, (si Adams me permite el robo indiscriminado del título de su libro).

Un día no muy lejano, hablaré de las deliciosas noches de Tablet And Roll que estoy teniendo el placer de disfrutar. Hoy solo presento un sueño, una mirada intensa y hambrienta del horizonte que pronto vendrá y que me hace sonreír sintiendo esas diminutas gotas de lluvia eléctrica que en un par de meses, o tal vez menos, se convertirá en tormenta.

James Maddock está ultimando la grabación de su nuevo álbum:"The Green", vía Pledge Music, http://www.pledgemusic.com/artists/jamesmaddock  Y, al igual que hice con el amigo Ricky Warwick, me siento orgulloso de contribuir a la grabación de, lo que promete ser una maravilla de disco, si he de atenerme a lo bien que suenan las dos canciones que el músico británico ofreció en directo hace cuatro días en The Cutting Room de Nueva York, "Once There Was A Boy" y "Rag Doll".
 Poderoso, intenso, divertido y apasionado, el puto James Maddock asegurando que "The Green" es un disco cargado de "rockin', groovin', swinging musical feast for the lug holes (ears)!" Y yo no lo podría describir mejor.

Os invito a soñar un poquito con lo que pronto será un paseo por la belleza eléctrica de la música y la pasión, de esa  que todos sentimos cuando comienza a sonar una canción.